Corazón palpitante, palmas sudorosas, pensamientos acelerados: para quienes viven con ansiedad, saben que la vida cotidiana puede ser debilitante con este trastorno.
Una de cada 13 personas en todo el mundo vive a diario con ansiedad, y según la Organización Mundial de la Salud (OMS), la ansiedad es el trastorno mental más común en el mundo. Para quienes viven con ansiedad, encontrar el método adecuado para tratar o suprimir la afección es un gran hueso duro de roer..
Los ansiolíticos de acción rápida, como Xanax y Valium, pueden ofrecer un alivio inmediato, pero pueden volverse adictivos. Los ansiolíticos de acción prolongada, como el Prozac, pueden ayudar a reducir los síntomas con el tiempo, pero no funcionan para todo el mundo.
Pero las investigaciones han descubierto que nuestro querido CBD ayuda a tratar la ansiedad.
En un estudio de 2019, 37 adolescentes japoneses con trastorno de ansiedad social (TAS) recibieron 300 mg de aceite de CBD durante cuatro semanas. Los adolescentes fueron evaluados mediante encuestas utilizadas para diagnosticar y medir los síntomas del TAS. Las propiedades ansiolíticas del CBD redujeron los síntomas asociados con el trastorno y proporcionaron un alivio comparable al de la paroxetina, un medicamento comúnmente utilizado para tratar la afección.
Otro estudio de 2019 examinó a pacientes ambulatorios de una clínica de salud mental de Fort Collins, Colorado. Cuarenta y siete pacientes expresaron preocupaciones sobre la ansiedad. En el transcurso de tres meses, la mayoría de los pacientes recibieron 25 mg diarios de CBD además de su medicación.
Tras la primera evaluación al mes, el 79,2% de los pacientes experimentaron una mejora de la ansiedad. Después de dos meses, el 78,1% de los pacientes informaron de una mejora adicional en comparación con el mes anterior.
¿Cómo debo consumir CBD si tengo ansiedad?
Si tienes curiosidad por utilizar el aceite de CBD como herramienta para ayudarte a controlar la ansiedad, la educación es esencial. Comprender las ventajas y desventajas de los distintos métodos de ingesta puede ayudarte a determinar qué forma de consumo se adapta mejor a tus necesidades.
Aceites y tinturas
Las tinturas y aceites de CBD son una forma rápida, fácil y precisa de consumir CBD. La mayoría de las tinturas contienen CBD en una base de alcohol. Los aceites de CBD contienen extractos de CBD infundidos en un aceite portador como el aceite de coco o de cáñamo.
Las tinturas y los aceites se toman con un cuentagotas, lo que facilita la medición de la ingesta. Cuando se administra, el cannabinoide entra rápidamente en el torrente sanguíneo: los resultados pueden verse en tan sólo diez minutos y durar hasta tres o cuatro horas.
Vapear CBD
El CBD se puede vaporizar utilizando un bolígrafo especial que vaporiza el aceite. Puedes conseguir cartuchos de CBD para vapear en cualquier tienda especializada. El efecto es similar al de los aceites y funciona de forma parecida.
Nutrientes
El CBD se puede añadir a casi todos los alimentos bajo el sol. Aunque es muy fácil de consumir en esta forma – y a menudo delicioso, especialmente en forma de ositos de gominola – puede tardar una hora o más en ver resultados.
Fumar
Fumar proporciona un método casi instantáneo para disfrutar de los efectos del CBD. Fumar envía el cannabinoide directamente a los pulmones y desde allí las moléculas de CBD entran en el torrente sanguíneo, donde se absorben rápidamente.
Dosis de CBD para la ansiedad
Como admiten la mayoría de los científicos y médicos, no existe una dosis universalmente recomendada de CBD y, hasta la fecha, no se han realizado ensayos clínicos a gran escala para determinar la dosis.
Consejos generales de dosificación
Algunos factores básicos que debes tener en cuenta a la hora de diseñar tu dosis de CBD son:
- Peso corporal
- Metabolismo
- Concentración CBD
- La gravedad de su ansiedad
Aumente la dosis
Ajuste la dosis del medicamento para lograr el máximo beneficio sin efectos secundarios. Se ha demostrado que el CBD es seguro incluso cuando se toma en dosis altas (300-600 mg), sin embargo, es aconsejable y más rentable empezar con una dosis baja e ir aumentándola gradualmente y controlar cómo te sientes.
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Este método le obliga a prestar atención a los sutiles cambios que se producen en su cuerpo a medida que reacciona a la medicación. La dosis óptima y la tolerancia de cada persona son únicas, y este proceso le permite familiarizarse con las suyas.
